De nombre científico anastatica hierochuntica, la diminuta Rosa de Jericó nos entrega flores pequeñas y de intenso color blanco, junto a sus llamativas hojas verdes y dentadas, que se contraen al secarse.
Esta especie es originaria de Afganistán, y pertenece a la familia de las crucíferas. Su altura no supera habitualmente los 15 centímetros, y no es tan fácil de hallar. Incluso ha sido utilizada con fines espirituales, para alejar energías negativas.
En relación a los cuidados que requiere, vale destacar que es capaz de permanecer cerrada y seca por mucho tiempo, hasta que el contacto con el agua la abre y recupera su belleza. Por eso, es necesario colocarla en un plato con agua.
También es posible sumergirla por completo en el agua, solamente cambiando la misma durante las primeras semanas. Sobrevivirá sin problemas en esa situación. Es importante mantenerla en un terreno húmedo y a una temperatura cálida, pero sin excederse en cuanto al calor.
¿Te ha parecido interesante? Compártelo. Tweet Martes, 18 de noviembre del 2008Categorías: Consejos, Cuidados jardinería, Flores, Plantas
Etiquetas: anastatica hierochuntica, crucíferas, Rosa de Jericó Estabilidad de la mujer embarazada: guía completa para su empresa
2020-09-11
La pequeña Rosa de Jericó
De nombre científico anastatica hierochuntica, la diminuta Rosa de Jericó nos entrega flores pequeñas y de intenso color blanco, junto a sus llamativas hoja
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